Jorge Luis Borges

Se designó a sí mismo “el primer trabajador” y reunía a miles de personas que estaban obligadas a cantarle “Perón, Perón, que grande sos”. Una persona que actúa así debe de estar loca.

Jorge Luis Borges, in Pilar Bravo and Mario Paoletti (eds.), Borges verbal, Barcelona, 1999, pp. 149-150